El Ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, Dr. Carlos Tomada, cerró la Jornada por el Día Internacional del Trabajo, organizada por la Licenciatura en Relaciones del Trabajo, del Departamento de Economía y Administración.
La actividad se extendió a lo largo del día viernes 9 de mayo, con la participación de estudiantes, docentes y miembros de diferentes organizaciones vinculadas con la temática abordada. Además del Ministro, disertaron otros especialistas, entre ellos, el Lic. Pablo Tavilla, Director- Decano del Departamento de Economía y Administración; el Dr. Luis Palmeiro, docente de Derecho Laboral I y Derecho de la Seguridad Social; el Lic. Hernán Manzotti, docente de Psicología del Trabajo y el Lic. Enrique Deibe, Coordinador-Vicedecano interino de la Licenciatura en Relaciones del Trabajo y actual Director del Centro Interamericano para el Desarrollo del Conocimiento en la Formación Profesional de la Organización Internacional del Trabajo.
Previo a su exposición, referida a la historia de las instituciones del trabajo, el Dr. Tomada ofreció una entrevista, en la que analiza los logros y desafíos de su gestión y la formación que se espera de los nuevos profesionales vinculados al campo del Trabajo.
¿Qué reflexión le merece el encuentro?
Esta es la primera vez que vengo a la Universidad, y es un gusto hacerlo a partir de una actividad vinculada con el trabajo, que ha sido uno de los ejes fundamentales de la política del Gobierno Nacional en estos once años. Siempre es oportuno reafirmar esta dirección, fundamentalmente, en un ámbito universitario como este, donde hay cátedras y carreras vinculadas con el trabajo, que, valga decirlo, han crecido y proliferados estos años. Actualmente, muchos alumnos encuentran salida laboral para esta inquietud.
¿Qué balance puede hacer de estos años de gestión?
Desde que asumimos, el 25 de mayo de 2003, creo que ha habido un punto de inflexión en lo que se refiere al trabajo y a sus instituciones. No olvidemos que fue a partir de ese tiempo que se generaron millones de empleos, que se recuperó la negociación colectiva, que el protagonismo sindical volvió a ocupar el lugar que siempre tuvo en la democracia argentina. Realmente, ha sido un tiempo en el que vimos retroceder la exclusión, la pobreza, la marginalidad y el trabajo no registrado. Un proyecto como este, un proyecto democrático, siempre es inconcluso; todos sabemos que tenemos que redoblar los esfuerzos para lo que nos plantea la Presidenta de la Nación, que es no bajar los brazos cuando de pobreza y de trabajo se trata.
¿Cuáles son los desafíos pendientes?
Los mismos, porque todo lo que hemos hecho siempre requiere de profundización. Es cierto que la desocupación ha retrocedido de manera muy importante, pero nosotros queremos que retroceda aún más; es cierto que el trabajo no registrado ha disminuido como nunca en la historia argentina, pero buscamos que disminuya más y es cierto que hemos trabajado en formación y capacitación: casi tres millones de argentinos han pasado por estas actividades del Ministerio de Trabajo, pero queremos que sean aún más. Entonces, lo que tenemos por delante es más profundización; queremos seguir ampliando los derechos.
¿Estando en una universidad, qué se espera de los nuevos profesionales vinculados al campo del trabajo?
Que sepan comprender, por un lado, un mundo que cambia y que sepan entender, por otro, que, desde cualquier sector donde se trabaje, tenemos la obligación histórica de seguir contribuyendo a una Argentina más igual. La aspiración histórica de los argentinos ha sido la igualdad, la tenemos en nuestro himno, es una aspiración popular; nuestro compromiso permanentemente es avanzar para lograr mayores niveles de igualdad.